¿Cómo preparar las mejores papas fritas?

La popular Milapapa, espectacular porción de papas fritas con una milanesa encima.

La mejor amiga de una milanesa, sea en sánguche o al plato, al menos en nuestro foodtruck, es una porción de papas fritas. Se llevan a las mil maravillas. En María Milanesa las servimos crocantes por fuera y cremosas por dentro. Imperdibles.

Si me piden una receta para conseguir las mejores papas fritas en casa, me arriesgo a recomendar una que mi esposo suele hacer. Si sale mal, lo culpan a él (jejejejeje).

Para empezar, deben elegir el tipo de papa que utilizarán. Cada variedad tiene su tiempo de cocción, por lo que la paciencia será primordial para lograr el objetivo. En casa, solemos usar la papa amarilla, blanca, canchán o nativas. Como les digo, es al gusto.

Entonces, una vez seleccionadas, las cortan (si quieren las pelan, pero son más rica con cáscara) y las lavan bien con agua fría. Es importante hacer ese procedimiento para quitarle el almidón y, así,  darle ese crocante que tanto nos gusta.

Ahora, viene lo importante. En mi casa las solemos freír en tres tiempos. El primero es blanquear las papas. Para ello, ponemos a hervir agua en una olla. Cuando está en ebullición, le echamos un poco de sal y un chorrito de vinagre. Introducimos las papas y las dejamos, en el agua hirviendo, por cinco minutos. Ojo, ese dependerá de la variedad y del tamaño del corte.

Luego, se retira y se dejan en reposo por unos 10 minutos. Pasado ese tiempo, ponen a calentar aceite en una olla, perol o sartén. Debe ser una generosa cantidad. Cuando el aceite esté caliente, volcamos nuestras papas. No todas juntas. Es preferible hacerlo por partes, por un tema de temperatura. Bueno, echamos las papas y las dejamos solo, SOLO, por dos minutos. Nada más. Después de eso, las ponemos en reserva por 30 minutos.

Pasado ese tiempo, volvemos a encender el fuego y metemos, otra vez, las papas hasta que estén en su punto. Las sacamos, les echamos sal y las comemos. Eso es todo. ¡Buen provecho!